Page 46 - Manual de l'activación de la sociedad humanista

Soporte Fiscalizador
La agregación de inquilinos del barrio como grupo social corporativo es propiciada por la comprensión de que la transparencia y la credibilidad en el emprendimiento, son aseguradas por la amplia e irrestricta fiscalización. Cada individuo y cada establecimiento es el mentor de ese permanente control. La supervisión de todo lo que ocurre en el emprendimiento es ampliada y afinada con el ingreso en el grupo social de cada nuevo integrante. El grupo social que ejecuta y financia, es el mismo que controla la calidad del resultado y el aprovechamiento del dinero que aplica. El plazo de las acciones, los resultados, las metas, todo es abiertamente acompañado en tiempo real. Eso, ejercitado diariamente, en cualquier momento, por mucha gente, inclusive por los integrantes de la porción de la población beneficiada, permite la mejor visión de los ítems que, por acaso, soliciten esclarecimiento. Nada escapa a las miradas vigilantes que confieren para criticar o aprobar, y critican para advertir o corregir. Nada de errado pasa desapercibido. Todo es transparente. Sin sacrificio. Cada fiscal evalúa el curso de los emprendimientos, acompaña la supresión de cada carencia primordial, confiere los rendimientos, controla las prestaciones de cuentas. Los inquilinos del barrio que no integran una AC3PL también ejercen ese control. Las fallas y sus responsables son rápidamente identificados, sin temores, sin atenuantes.
Así, agregados como un grupo social guardián, individuos y establecimientos consiguen asumir la acción protocolar y remover las carencias primordiales de la porción vulnerable de la población del barrio. Sin embargo, por la disposición táctica, la suficiencia organizacional de las PAHS precisa también incluir a la empresa privada.
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